Estas son algunas de las preguntas tipo acertijos o rompecabezas que las empresas en la actualidad acostumbran hacerle a sus candidatos durante una entrevista; su objetivo no es que los candidatos sean exactos con las respuestas, sino conocer su capacidad de razonamiento y creatividad.
Aunque es una forma innovadora de tener una aproximación a la psique de los candidatos, no es suficiente para conocerlos a profundidad y puede convertirse en una trampa para las áreas de reclutamiento. La metodología Topgrading (la ciencia detrás de las mejores contrataciones) nos recuerda una de las costumbres más comunes antes de una entrevista: dejarnos impresionar por un currículum y no darle importancia a que este se alinee a lo que el puesto necesita.
El aspirante puede ser muy bueno, pero si durante la entrevista no se le señalan los objetivos, metas y resultados que debe dar en su primer año de trabajo, no podrá alinearse a lo que el puesto requiere. Y si llegase a fallar, culparía a quienes nunca le dijeron lo que se esperaba de él.
Otro error de la contratación: no verificar minuciosamente las referencias en los currículums. Puede ser algo obvio, pero los candidatos suelen mentir y endulzarlo para llamar la atención de la empresa, por lo que, si un candidato pasa lo primeros filtros y responde de forma creativa las preguntas acertijo, dará igual cuando consiga el puesto, pues no tendrá las competencias y habilidades que se requieren.
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Fuente: Topgrading y 20 minutos